Varias son las obras clásicas chilenas que han ido conformando la arquitectura de este país, siendo ejemplos hasta ahora de calidad espacial, y plástica, y que representaron las tendencias arquitectónicas más novedosas del momento, influenciadas por los grandes de la arquitectura moderna, como Le Corbusier, o Mies Van der Rohe, adoptando conceptos como la simplicidad, el funcionalismo y la economía.
Sin embargo, estas obras tienen un sello especial, ya que adaptan estos principios a la realidad local, donde se mezclan los conceptos del modernismo con la tradición representada por la arquitectura colonial, y vernácula, e incorporando además una estructura que debe soportar los constantes movimientos de tierra presentes en este país.
Los dejamos con una selección de los mejores clásicos chilenos.
Capilla del Monasterio Benedictino / Gabriel Guarda, Martín Correa
Mercado Central de Concepción / Tibor Weiner & Ricardo Muller
Edificio Copelec / Juan Borchers, Jesús Bermejo & Isidro Suárez
Edificio Copacabana / Larraín+Larraín
Estación de Biología Marina de Montemar / Enrique Gebhard
Unidad Vecinal Portales / B.V.C.H
Edificio de CEPAL / Emilio Duhart
Conjunto Residencial Torres de Tajamar / Luis Prieto Vial & B.V.C.H